Elio Martínez.
Un veterano sobre D’Angelo Russell
Salió de Los Ángeles con muy mala imagen. Comportamientos de adolescente, actitudes cuestionables y el bombazo de filtrar una conversación privada en la que un compañero suyo reconocía engañar a su pareja. Aquello fue demasiado y así fue como llegó Russell a los Nets en junio de 2017.
Dieciocho meses después era elegido para su primer All-Star y hace unas semanas firmaba un contrato máximo de 117 millones de dólares y cuatro temporadas.
No podemos conocer todo lo que ha sucedido detrás de las cámaras con D’Angelo Russell, pero un veterano como Jared Dudley ha revelado detalles interesantes cuando se encontró con él y la evolución de su relación como compañeros.
“Realmente yo no juzgo a nadie. Todos cometemos errores. Llegué dispuesto a enseñar si él quería aprender. Y hay que decir que a pesar de ser joven es alguien que quería escuchar, se tomaba la información bien, respondía e incluso hacía preguntas. Creo que eso es algo que sorprenderá a Draymond (Green) y otros chicos en Golden State. Es un tipo que quiere aprender, mejorar y ser entrenado”.
Dudley prosiguió con sinceridad cuando le preguntaron qué tipo de preguntas hacia Russell:
“¿Por qué perdía el balón en ciertas situaciones? Tuvo un problema con las pérdidas al principio del año. En defensa quería ver qué cosas podía hacer cuando creía que había jugadores que estaban anotando mucho. Sobre contratos y cómo conseguir un buen contrato. Sobre perrcepciones y la vida en general. Hablamos mucho de baloncesto, pero pasamos con estos tipos más tiempo que con nuestras familias, así que hablamos de esposas, novias y finanzas. Quería empaparse de conocimiento”.
Un último enfoque interesante de Dudley fue, como veterano, lo que dijo y aconsejó a Russell:
“Tu reputación lo es todo. Los equipos hablan. Todos los general managers y presidentes son amigos, así que cómo trabajes se sabrá. Eres lo suficientemente joven para que tu reputación no esté ya definida, así que eso es lo que hizo. Que cuide su cuerpo. Steve Nash siempre me dijo que acudiese a la sala de pesas. Que me diese baños fríos, que me diesen masajes y cuidados”.
La presentación de Leonard y George
Fue un día grande en Los Ángeles. Steve Ballmer, propietario de los Clippers, estaba exultante y optó por gritar y liberar energía en lugar de ceñirse al guion establecido. George y Leonard fueron presentados como nuevos jugadores de los Clippers y ese ratito dio mucho qué hablar por lo que dijeron .
“Habéis crecido en L.A. y conocéis la dinámica de la NBA en esta ciudad y la gigante sombra que proyectan los Lakers sobre los Clippers a lo largo de todos estos años. ¿Es importante para vosotros liderar a este equipo lejos de esa sombra?”
Tras responder con sorna y su habitual sinceridad ante la prensa diciendo que en los últimos años los Clippers habían sido mejores que los Lakers, Kawhi Leonard dijo algo que me dio que pensar:
“Se trata solo de los medios. Van a tener la atención. Son Los Angeles Lakers. Han ganado títulos durante muchos años. Pero como decía, es solo un tema de los medios. Incluso aunque ganemos, quién sabe si la cobertura cambiará en algún momento. No pienso en eso. Solo quiero ganar. Ya sabéis que hago lo que sea para que mis compañeros y yo estemos contentos. Nuestro objetivo será en lo que esté centrado y motivado para lograrlo. Y si llegamos a ganar el campeonato y no tenemos cobertura no tendré problema con ello (risas)”.
La NBA no es como el fútbol europeo en el que para ganar una Champions League las estrellas saben que solo tendrán opciones si juegan en el Real Madrid, Liverpool, Barcelona o Juventus de turno. En la NBA todos los equipos parten de las mismas reglas del juego y por tanto todos tienen opciones de hacer las cosas bien, trabajar, buscar la suerte y ganar el título.
Y lo que comenta Leonard es lo que debe preocupar a los Lakers como debería preocupar a los Knicks desde hace tiempo. No vale con la tradición, los focos y el gran escenario. Los jugadores modernos, o al menos algunos decisivos como Leonard o George, no sienten la necesidad de jugar en una franquicia histórica. Lo que quieren es emplearse a fondo con equipos bien gestionados y estar rodeados de compañeros con los que congenian bien.
George se expresó en la misma línea:
“Es nuestra oportunidad de construir algo y hacer historia. No han llegado nunca a las Finales ni las han ganado y eso es algo que me atraía a la hora de tomar mi decisión”.
Sin embargo, algo sí hace ver que la sombra de los Lakers es muy alargada en el subconsciente y que tendrán doble motivación cuando se enfrenten a ellos. Leonard y George dijeron que ambos eran de los Clippers desde pequeñitos, algo que aparte de no ser cierto, no es habitual que se diga en la NBA.
Anfernee Simons
Los Blazers han extendido el contrato de C.J. McCollum por tres años más a cambio de 100 millones de dólares, pero en la plantilla hay otro jugador de backcourt que puede explotar en cualquier momento. Anfernee Simons es otro de los nombres que tengo marcados en rojo para la próxima temporada porque tiene calidad y juventud para convertirse en una revelación.
Su primera regular season fue testimonial ya que apenas disputó 20 partidos, pero el último encuentro fue un bonito aviso de lo que podría ofrecer este jugador: 37 puntos con 7 de 11 en triples en 48 minutos sin descanso. Sin haber cumplido los 20 años, en playoffs Terry Stotts prefirió no utilizarle, pero en la Summer League hizo un partido de 35 puntos y terminó superando el 70% de true shooting. El chaval puede anotar y es cuestión de ver si aprovecha ya sus oportunidades sin Seth Curry y Evan Turner en plantilla.
En cualquier caso es tan joven que no sería extraño verle explotar bien entrada la siguiente década.
La nueva era en Oklahoma
El general manager de los Thunder, Sam Presti, anunció en julio de forma oficial el nuevo rumbo de la franquicia. Tras una década compitiendo por el título disputando nueve de las últimas diez ediciones de playoffs, toca un doloroso paso atrás. Presti publicó una carta en The Oklahoman recordando los once años que ha pasado la franquicia en la ciudad:
“La unión del equipo con los jugadores ha cambiado vidas, ha potenciado la economía local, ha transformado el centro de nuestra ciudad y —quizás lo más importante—, ha proporcionado confianza y reconocimiento a una ciudad y un estado que han sido olvidados muchas veces.
Las palabras ‘Oklahoma City’ son ahora conocidas en todo el mundo, asociadas a jugadores icónicos, un alto nivel de éxito y una conexión irrompible entre la ciudad y su equipo. El deporte en un pequeño mercado consigue una cosa sobre todas las demás: crear una serie de recuerdos imborrables a través de los cuales individuos forman una amplia comunidad”.
(Es cierto que antes de que existiesen los Thunder Oklahoma City era una ciudad desconocida fuera de Estados Unidos).
“Este verano, la historia de Oklahoma City Thunder pasará a nueva fase. En las últimas semanas hemos terminado nuestra relación con jugadores clave, gente que ha representado nuestra ciudad ante el mundo, que se ha sacrificado por nosotros y ha florecido en nuestro nombre. Aunque ha sido duro, creo que dadas las circunstancias era necesario. Diciendo adiós al pasado hemos empezado a visualizar nuestro futuro. El próximo gran equipo de los Thunder está ahí, pero tomará su tiempo alcanzarlo y disciplina poder mantenerlo”.
Seleccionar en el Draft a tres futuros MVP de manera consecutiva será algo prácticamente imposible de replicar —por los Thunder y cualquier otra franquicia—, pero Presti tiene un buen historial como para confiar en que sea capaz de dirigir el nuevo rumbo del equipo. A falta de saber qué pasará con Chris Paul, parece que no lucharán por playoffs y que es momento de iniciar la reconstrucción tocando fondo.
Lo que flotará en el ambiente si los Thunder no salen de la irrelevancia más pronto que tarde es Seattle. Los Thunder antes eran los Sonics y si Oklahoma City no vuelve a ser un equipo consistente, cada vez habrá más voces pidiendo su vuelta al Noroeste de Estados Unidos. Tal vez por eso Presti haya insistido en su carta en la conexión entre ciudad, estado y equipo, en plan aviso a navegantes.
La renovación de Draymond Green
Los Warriors y Green sorprendieron hace unos días cuando se filtró que el ala-pívot extendía su contrato por cuatro temporadas y 99,7 millones de dólares hasta la campaña 2023-24. La renovación llegó 11 meses antes de que el jugador se convirtiese en agente libre sin restricciones y también en esta noticia hay varios detalles que comentar.
Green no quería riesgos. Podría haber esperado al verano de 2020 para recibir ofertas de cuatro años y 150 millones de dólares o cinco años y unos 200 millones. Es más, en caso de que en la próxima campaña sea elegido All-NBA o Jugador Defensivo del Año, hubiese tenido derecho a un ‘súper máximo’ de cinco años y 235 millones. Pero ha preferido la seguridad de los casi 100 millones que le ponía encima de la mesa Golden State. ¿Por qué? Por varios motivos:
Los 99,7 millones que le han ofrecido son la oferta máxima que Golden State podía plantear ahora mismo, no había más que negociar ahora. Lo tomaba o lo dejaba. (La cifra es baja porque en 2015 Green firmó una renovación por algo menos del máximo que podía cobrar)
En 2020 no habrá tantos equipos con dinero como en 2019 y Green no tendría fácil acabar entonces en un equipo candidato al título, una de sus prioridades ahora mismo. (De haber sido agente libre en este 2019 loco tal vez otro gallo hubiese cantado).
Se ha asegurado dos interesantes cláusulas en su contrato. Opción de jugador en 2023 que le permitiría salir al mercado como agente libre con 33 años y un 15% de subida de salario en caso de ser traspasado.
No quería volver a pasar por una situación similar a la del año pasado como la que protagonizaron los Warriors y Durant en la que se habló más de que si Durant seguiría en la franquicia que de otra cosa.
Para los Warriors también era una decisión relativamente sencilla. Sin Durant y con los contratazos de Curry y Thompson a años vista, asegurarse los derechos de Green por varias temporadas más les permite mantener al trío de All-Stars que les llevaron al título en 2015 y las 73 victorias en 2016. En el mercado de agentes libres no tienen nada que hacer durante un tiempo debido a los salarios de Curry y Thompson y ahora podrán centrarse en buscar opciones por D’Angelo Russell si finalmente prefieren traspasarle, así como tratar de explotar la excepción de traspaso de 17 millones (por la operación de Iguodala) entre el 1 y 7 de julio de 2020.
Audiencias
La NBA ya ha publicado su calendario para la campaña 2019-20 y una de las novedades es que habrá partidos que empezarán antes, especialmente muchos de Lakers y Warriors. ¿Por qué? Porque en la costa este es donde más espectadores hay y lo de que un partido comience a las 22:30 y termine de madrugada no favorece las audiencias.
Previamente pudimos conocer datos de audiencia de las Finales 2019 de la NBA y hay tres detalles que me llamaron la atención:
En EEUU fueron las sextas Finales con peor audiencia desde 1981, pero con el truco de que no se cuentan las audiencias de Canadá y aún así se lograron mejores datos que algunas Finales de la primera década del actual siglo.
En Canada 7,7 millones de personas vieron el sexto y definitivo partido. 7,7 millones es algo más del 20% de la población de Canadá.
En China 21 millones de personas vieron el Game 6 a través de Tencent, la plataforma digital. 21 millones son muchos.
Ten amigos para esto
Un día antes de que se disputase el último partido NBA en la historia del Oracle Arena ya se sabía que Kevin Durant no podría jugarlo debido a su terrible lesión. Oaklandish, una empresa muy especial porque uno de sus principales objetivos es crear empleos de calidad en Oakland y hacer crecer la comunidad de la ciudad, ideó una camiseta con un diseño especial con motivo de ese Game 6: For Oakland, For KD.
Tengo la suerte de contar con un amigo viviendo por la zona, así que no dudé y le encargué una unidad que ya está en casa. El último partido del Oracle, el último partido de KD siendo miembro de los Warriors y el último partido de los Súper Warriors. Cuando me la ponga me acordaré de todo ello.
500.000 suscriptores
El proyecto de The Athletic es un monstruo con el que Extra nbamaniacs no puede ni soñar con compararse (The Athletic ha tenido rondas de inversión de más de 90 millones de dólares), pero es una excelente noticia que alcance ese impresionante número de suscriptores y que tengan previsiones de llegar al millón al finalizar el año.
Demuestra que hay interés por proyectos periodísticos que se alejen de las páginas vistas al peso y el clickbait, de un nuevo camino por el que debemos apostar —medios y lectores— para que podamos informarnos y entretenernos con las garantías de que lo que leamos sea solo para eso, para informarnos y entretenernos, no para contarnos medias verdades y contenido que secuestre la atención de nuestro cerebro.
En The Athletic o Extra nbamaniacs no ocurre eso de estar leyendo algo en Internet e ir saltando de párrafo en párrafo sin terminar ninguno ya que estás leyendo lo mismo una y otra vez sin avanzar por culpa de las palabras clave y el mínimo de palabras que recomienda Google.
Puedes leer la primera entrega de ‘El verano NBA’ aquí y la segunda, aquí.